Consejos para superar el miedo a viajar
Ante tantos accidentes aéreos que han ocurrido es normal que las personas sientan cierto miedo o hasta incluso desarrollen una leve o en algunos casos grave fobia a subirse a un avión. El ejemplo más reciente que tenemos es el lamentable accidente que tuvieron los jugadores del equipo Chapecoense.
Según estudios, entre 10 a 40% de las personas padecen algún grado de malestar, inquietud o temor al tener que volar. Si una persona nunca viajó en avión esto es normal. Pero el problema surge cuando la ansiedad toma características más intensas y nacen las reacciones fóbicas o situaciones graves de pánico. Hay emociones que se juntan al momento de afrontar un vuelo para este porcentaje de personas y son los siguientes:
- Angustia: Es inconsciente y no responde a una causa externa. En niveles mínimos es considerado normal y hasta adaptativa. La angustia está dentro de cuadros fóbicos, también como la depresión ansiosa, las obsesiones, las compulsiones y los trastornos psicológicos.
- Temor: Inquietud por sentir cierto grado de peligro extremo.
- Miedo: Temor intenso al peligro externo, frecuentemente va acompañada de una agitación. El miedo existe por una amenaza externa, es una variante del temor, más intensa.
- Fobia: Una reacción al miedo intenso, se da de manera desproporcionada, Las fobias pueden ser aprendidas como consecuencias de experiencias traumáticas directas o por la observación de tales experiencias en terceras personas
¿Cómo afrontar este tipo de situaciones? Según el piloto y psicoterapeuta, Modesto Alonso, señaló lo siguiente: “De acuerdo a la gravedad, al planteo del paciente, y al tiempo del que disponga -ya que a veces la persona tiene que viajar próximamente-, el tratamiento se encara como una terapia o como un entrenamiento, que si bien es terapéutico no está planteado como una terapia».
A partir del diagnóstico, el paciente recibirá información aeronáutica, «se le explica todo -dijo Alonso- y se responden sus dudas ¿se rompe un avión en la tormenta?, ¿el rayo lo puede hacer caer?, ¿en la turbulencia?, ¿y si se rompe un motor?, ¿y si se incendia un motor?, ¿y si se muere un piloto?… les explico todo, hasta la meteorología, para que sepan cómo funcionan las nubes, las tormentas, etcétera».
Respecto al tipo de psicofármacos que pueden llegar a ser necesarios para complementar el tratamiento de la fobia a volar, el piloto y psicoterapeuta reveló que, en general, se usan ansiolíticos. «En algunos lugares pueden usar un betabloqueante, que evita la reacción excesiva de angustia y los componentes físicos de la angustia; en otros lugares pueden usar unos antidepresivos modernos que también tienen un efecto ansiolítico. El psicofármaco apunta a disminuir el grado exagerado de alerta ante la situación», subrayó.
Fuente: LaBrujula24
Deja una respuesta